Conocí a
Camila un día lluvioso del 2014 cuando iba a juntarme con Tamara, una editora
de Córdoba. Ella, como mano derecha de la editorial, fue la que organizó la
reunión y así fue que quedamos en contacto.
Actualmente, esta joven jujeña que viven en Córdoba, está dando sus primeros pasos como autora publicada y tuvo
la amabilidad de hacerme llegar un ejemplar de su novela para jóvenes Las elegidas de Osiria y ahora me robo
un poco de su tiempo para hacerle una entrevista para que todos la conozcamos
un poco más.
CHB.: Hola, Camila, estás terminando un gran
año profesional podríamos decir, y por eso me gustaría volver al principio, a
tu niñez… ¿leías mucho? ¿Qué tipo de libros te atrapaban?
Leía de
todo, en realidad. El género fantástico siempre fue mi preferido. Me gustaban
mucho también las novelas de amor y las de aventura. Me encantaban Julio Verne,
Louisa May Alcott, Emilio Salgari, las hermanas Brontë, Jane Austen… Tuve la
suerte de tener padres que fomentaron mi amor por la lectura, y siempre tuve a
mi disposición los libros que quería. Había una colección en particular, que no
sé si se sigue consiguiendo… la colección Billiken de tapa roja. Era muy muy
buena, incluía varios clásicos de la literatura universal adaptados para los
más chicos.
CHB.:
¿Consideras que siempre fuiste muy imaginativa o fuiste alimentando esa
imaginación y creatividad con los años?
La verdad,
no te sabría decir. Empecé a leer desde muy pequeña, así que no sé si la
imaginación ya estaba presente en mí o se fue desarrollando con la lectura.
Estimo que lo segundo, los libros siempre te abren la puerta a mundos
insospechados.
CHB.: ¿En
la escuela tenías facilidad para Lengua y Literatura?
Sí, era lo
que más me gustaba. Debo confesar que siempre disfruté más de las clases de
Literatura que de las de Lengua, pero no sé si se pueden separar en la práctica.
Una cosa necesariamente lleva a la otra y viceversa. Para poder escribir bien,
hablar bien y entender los discursos, orales y escritos, tenemos que conocer
las reglas del lenguaje.
CHB.:
¿Cuándo te diste cuenta que tu llamado era la escritura/literatura?
Creo que lo
supe desde el principio. En otra nota dije la misma frase, pero es así: escribo
desde que tengo uso de razón. Al principio eran historias para mí misma, mis
propias fantasías… pero de a poco empecé a pensar en compartir esas historias.
No es un proceso simple, ya que la exposición implica también que se pueden
decir cosas negativas, pero mientras esas críticas me sirvan para crecer desde
lo personal y lo profesional, por supuesto son bienvenidas.
CHB.: ¿Qué
carrera estudiaste en la universidad? Y ¿qué trabajos desempeñaste después o
durante tus estudios?
Soy Técnica
en Medios de Comunicación, gestora cultural y Diplomada Universitaria en
Gestión Editorial. Y estoy rindiendo las últimas materias para terminar con la
Licenciatura en Humanidades con orientación en Literatura.
Empecé
trabajando en la librería El Ateneo. Fue una experiencia espectacular. Era un
sueño hecho realidad estar rodeada de libros todos los días, enterarme de las
novedades editoriales... Después armé junto con una socia un pequeño
emprendimiento, una librería/espacio
cultural que me dio muchas satisfacciones y que me enseñó bastante sobre el
rubro. Luego trabajé como gerente de una librería de la zona norte (Córdoba). Y
en paralelo a esos trabajos dicté clases de español para extranjeros. Me
considero una afortunada: siempre pude trabajar en lo que me gusta y pude de a
poco ir desarrollándome…
CHB.: ¿Cómo
terminaste trabajado para Tamara en la editorial?
Cuando la
librería de la que era gerente cerró, pasé directamente a trabajar con Tamara. Ella
me conocía porque El Emporio era uno de los proveedores de la librería, así que
siempre estábamos en contacto.
CHB.:
¿Estar rodeada de autores que publicaban te motivó a sacar a la luz tu
historia? ¿En qué momento decidiste que ibas a publicar?
En los
últimos tiempos conocí a escritores maravillosos y aprendí muchísimo de todos
ellos. Pero lo de mi libro fue algo inesperado. Yo tengo varias novelas
escritas para preadolescentes y adolescentes, y como te decía antes,
últimamente había estado pensando en la forma de compartirlas. Hace un par de
meses se comunicó conmigo el escritor y empresario Antonio Mateo Allende y me
preguntó si tenía algo listo para chicos, porque él quería empezar una pequeña
colección. Le mandé lo que yo consideraba que estaba mejor terminado, le gustó
y decidió publicarlo. Te imaginarás mi emoción y mis ansias…
CHB.: ¿Cómo
fue el proceso de creación de la historia?
Todas las
novelas que tengo escritas parten de sueños que alguna vez tuve y que recordé
al día siguiente. La idea principal al menos. Y después hay un trabajo de
escritura a conciencia, de relectura, de corrección…
CHB.:
¿Tenés alguna rutina o manía para escribir?
No, escribo
cuando siento la necesidad. Últimamente te diría que cuando puedo, porque tuve
un año muy atareado. Lo único que necesito es estar en silencio, con ruido no
me puedo concentrar. Sé que algunos escritores escriben con música, pero para
mí es imposible.
CHB.: A la
hora de corregir el manuscrito ¿Cómo te llevaste con el proceso? ¿Quién te
ayudó?
Lo
trabajamos en conjunto con María Musicant, la mujer de Mateo. Ella es una
excelente editora y tiene una habilidad innata para estas cuestiones. Si bien
yo he corregido los trabajos de varios autores, cuando se trata del trabajo
propio es muy complicado abstraerse y ser objetivo. Uno como creador ya conoce
de memoria los personajes y la trama, y quizás da por sentadas cosas que están
en la mente pero que no se plasmaron en el papel. Creo que toda obra es
susceptible de ser mejorada y que hay que escuchar las opiniones de quienes
forman parte del proceso. De hecho, por algo existe la figura del editor, y en
este caso yo tuve que pararme del otro lado en relación a mi trabajo en la editorial.
CHB.:
¿Tuviste que modificar mucho la historia? ¿Cómo ibas reescribiendo y mejorando
el libro?
No, la
historia siempre fue la misma. Como te dije antes, lo que se hace siempre con
el trabajo de cualquier autor es revisar, a nivel contenido y desde los ojos de
un tercero, que no hayan quedado baches. Pero por suerte así como estaba
planteada les gustó desde el principio a los editores, sólo se perfeccionaron
algunos detalles.
CHB.:
Aparte de vos y tu editor ¿Quién es tu “primer lector”? (familiar, amigo…)
Mi primera
lectora en el caso de este libro en particular fue mi querida amiga Noelia
Orellano, a quien le doy las gracias por la paciencia, el cariño y la buena
voluntad. Y después fue pasando por otras manos.
CHB.:
Siendo Las elegidas de Osiria una
historia de fantasía preadolescente ¿Te ves escribiendo para un público adulto?
Al menos
por el momento no. Todo lo que tengo escrito, publicado o no, es para ese
público. Supongo que tiene que ver también con que esa edad fue muy definitoria
para mí, y los libros siempre me acompañaron.
CHB.: La
edición es muy bonita ¿Quién fue el ilustrador? ¿Trabajaron en conjunto?
Yo tenía la
idea del mandala dando vueltas en la cabeza, pero como no soy diseñadora no
sabía cómo bajarla al papel. Las diseñadoras, a quienes agradezco muchísimo,
fueron María Musicant y Martha Cargnelutti, que trabajan con el editor también en
otros emprendimientos. No podría estar más contenta con el resultado.
CHB.: Dejando
un final tan atrapante, supongo que la novela formará parte de una saga ¿Es
así? ¿Ya tenés escrito algo de la continuación?
El libro
tiene un final que “cierra” en sí mismo. Es decir, se puede leer como una
historia única. Pero efectivamente es parte de una saga. Por el momento tengo
dos partes más que le siguen y estoy pensando en una tercera, pero con la misma
idea: que se puedan leer tanto como historias separadas como en conjunto.
CHB.: El
mundo literario es bastante complejo y hasta cruel con los nuevos talentos ¿Qué
consejos le darías a alguien que tiene un borrador en mano y quiere aventurarse
a publicarlo?
Quizás no
soy un buen ejemplo porque, como te comentaba antes, en mi caso fueron los
hechos que se sucedieron los que me impulsaron a mostrar mis escritos, no podía
dejar pasar la oportunidad. Pero hay que animarse; en Córdoba (y en todo el
país) hay editores muy capaces que, aunque no necesariamente se interesen en
publicar esos textos porque quizás haga falta trabajarlos o no encajen en el
catálogo, los pueden orientar en cuál es el mejor camino a seguir.
CHB.: Y
para despedirnos ¿Qué te espera para este 2015? ¿Qué planes tenés en mente que
quieras compartir con los lectores del blog?
Tengo
varios proyectos personales de índole cultural que ojalá se den. Y lo más
importante entiendo que va a ser trabajar con el libro. La idea es presentarlo
en los colegios y empezar a dictar talleres para chicos. Yo en este momento
dicto talleres de promoción de la lectura y escritura para docentes de nivel
primario; me encantaría poder trasladar ese formato de trabajo directamente a
los niños.
Muchas
gracias.
Facebook del libro: Las elegidas de Osiria
Perfil de la autora aquí
Hola Constanza! Genial la entrevista. Tengo que decir que no conocia a la autora asi que te agradezco la entrada! Me encanta conocer y saber mas de autores de nuestro pais! El otro dia te comente la reseña del libro de ella, y la verdad que parece super interesante. La verdad que la portada es genial! Muy colorida y viva! Parece muy joven, la admiro!
ResponderEliminarGracias por compartir la entrevista y le deseo todos los exitos a Camila! Saludos!
Hola!! El libro es hermoso! me encanto! me parecio muy atrapante, lo recomiendo! Genial la nota! Muchos éxitos!
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